Detrás de la espesa arboleda, dos majestuosos torreones de cúpulas cónicas asomaban bajo un fondo azul. Aquí estoy yo, parece decir. Los torreones, junto con el kilométrico muro vertical de piedra, se asomaban presumidos en el fondo del estanque que lo separa del resto de lo real.
Un redoble de campanas. Una música instrumental que no sabes de donde procede, pero que te gusta. Unas manos que te seducen y te indican por que puerta entrar. Una espaciosa sala te espera, con el techo cubierto de oro, con la imperial mesa de madera abarrotada de manjares, y con 51 ángeles pendientes de tus movimientos. ¿Bailamos?, pregunta la princesa.
Amplias escaleras con forma de caracol te conducen a las plantas superiores, habitaciones para dormir a cuerpo de rey, con un mobiliario de madera tallada proveniente de todos los rincones del mundo, con cuadros de gente tan poderosa como ambiciosa en sus paredes. Cuidado con la mesita de noche a la hora de desplazarla. El pasadizo secreto detrás de ella podría ser descubierto.
Bajando hacía las profundidades, pasando por la sala de armas, alargados pasillos y amplios vestíbulos, la disputa entre el bien y el mal, ángeles y demonios, continúa dando que hablar. El poder a veces tiene malas alianzas, y caballeros y magos intentan hacerlo comprender. ¿Pero como hacer entender a aquel que alcanza la fortuna y no tiene corazón?
Así son algunas de las decenas de pinceladas que puede dejarte Bojnice Castle, un castillo gótico construido en el siglo XII. Antigua propiedad de reyes y ricas familias del medievo, la fortaleza llego a manos de la familia Palffy en el siglo XIX, quienes se encargaron de hacer una reconstrucción romántica del complejo basándose en los bellos castillos franceses del Loira. El resultado logró ser espectacular, un escenario ideal de películas de fantasía y cuentos de hadas.
Con un sinfín de historias y cuentos a sus espaldas, Bojnice Castle es uno de los castillos más visitados en Eslovaquia, recibiendo cientos de miles de visitantes cada año. Sin duda, un viaje que se te queda grabado en la retina, y la guinda a un año que he tenido impresionante que ya va cogiendo el camino de la despedida.
(sigue visualizando este cuento de hadas, a máxima resolución, pinchando AQUÍ)
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